La entidad dice que a raíz de ese aumento, el volcán «sigue siendo muy inestable» y se mantienen las alertas.
Este jueves 20 de abril, el Servicio Geológico Colombiano (SGC) informó que detectó un mayor nivel de actividad en el volcán Nevado del Ruiz, que desde el pasado 31 de marzo se encuentra en alerta naranja por peligro de erupción.
Según lo dicho en un comunicado por el SGC, la actividad sísmica predominante este miércoles en el volcán estuvo relacionada con el movimiento de fluidos al interior de los conductos volcánicos y asociada a emisión de gases y ceniza.
La sismicidad se incrementó con respecto al día anterior y los temblores se asocian «al fracturamiento de roca al interior del edificio volcánico», según el organismo.
En consecuencia, dice el SGC, la actividad del volcán «sigue siendo muy inestable», lo que unido a otros eventos como «la presencia de anomalías térmicas en el fondo del cráter mayores a las presentadas en meses anteriores asociadas con la salida de ceniza, son parámetros que indican un nivel mayor de actividad de este con respecto a semanas anteriores, los cuales deben ser monitoreados de manera permanente y especial».
El Servicio Geológico agregó que en relación a la actividad superficial, la «altura máxima de la columna de gases fue de 1.800 metros medidos desde la cima del volcán, la cual estuvo asociada a una emisión de ceniza registrada el 19 de abril».
Cabe recordar que el volcán Nevado del Ruiz hizo erupción el 13 de noviembre de 1985 y el deshielo de sus glaciares provocó una avalancha que sepultó la ciudad de armero, en el departamento del Tolima, acabando con la vida de más de 23.000 de sus 25.000 habitantes, siendo esta la mayor catástrofe natural de Colombia.
Otro dato que se sumó a la información es que el miércoles la Fuerza Aérea Colombiana (FAC) hizo un sobrevuelo al rededor del cráter y que «en este momento se está analizando y procesando la información obtenida».
El SGC concluye que la actividad del volcán continúa en nivel naranja, lo que indica que existe una probabilidad de que en días o semanas haga una erupción mayor a las que ha hecho en los últimos 10 años.
