Para las comunidades de varios sectores de Cartagena, las chivas turísticas se han convertido en un verdadero problema ambiental, al menos por los altos decibeles con los que circulan.
Consumo de alcohol sin control, incluso de menores, altos decibeles de ruido que despiertan a los residentes, caos vial, uso de sustancias alucinógenas y parqueo al garete, tan solo son algunos de las problemáticas que afectan a la ciudadanía.
Ciudadanos denuncian que el ruido que emiten estos vehículos a altas horas de la noche es exagerado, por lo que piden su regulación. Lo mismo ocurre con el consumo de licor y otras sustancias a bordo de las chivas.
Por ende, solicitan que los permisos y distintos documentos con los que deben contar sean revisados para promover el orden.
Por esta razón, la administración de Dumek Turbay estaría preparando un decreto que busca regular el ámbito de las chivas en Cartagena, especialmente en materia vial (con horarios y prohibiciones en zonas y calles), de control de documentación legal y permisos, y con operativos contra el consumo de licor y de otras sustancias en los recorridos.
El decreto estaría listo antes de finalizar la semana, y con este se buscará sacar de la ciudad a las chivas que no están matriculadas en Cartagena, si estas no cumplen con una serie de requisitos, regulaciones y tributos.
Con el decreto buscan intervenir un problema social y vial que ha causado incomodidad en los últimos años, promoviendo que las chivas recuperen su rol en el turismo familiar.