La Corte Suprema de Justicia ratificó, en una de sus primeras decisiones del año, la condena de 5 años y 2 meses de prisión contra la influencer y empresaria Daneidy Barrera Rojas, mejor conocida como Epa Colombia, por varios delitos relacionados con las protestas sociales de noviembre de 2019. Barrera fue hallada culpable de perturbar el servicio público de transporte colectivo, instigar a delinquir con fines terroristas y dañar bienes ajenos.
La condena está vinculada a un video que la influencer publicó en sus redes sociales, en el que se la veía destruyendo una estación de Transmilenio con un martillo durante las manifestaciones que afectaron al país en ese período. Este hecho fue uno de los momentos más mediáticos de las protestas, un contexto que también estuvo marcado por otros actos de vandalismo.
La notoriedad de Epa Colombia había comenzado en 2016, cuando un video en el que expresaba su apoyo a la Selección Colombia de Fútbol durante la Copa América se viralizó. Sin embargo, la situación judicial de la joven cambió drásticamente con la publicación del video del acto vandálico, lo cual, según las autoridades, fue determinante para que fuera procesada, dado que, de no haber sido por esta grabación, probablemente no se habría abierto una investigación en su contra.
La sentencia es una muestra del enfoque judicial frente a los delitos cometidos durante las protestas sociales y el impacto de las redes sociales en la justicia penal.