Tras los desmanes la noche del Miércoles en medio del encuentro futboleros en el estadio Romelio Martínez de la ciudad de Barranquilla, entre Junior y River Plate que además debió detenerse por varios minutos tras afectar con gases lacrimógenos a los jugadores en el campo, dejó una mala sensación en el cuerpo técnico del equipo rival y sus jugadores.
Ayer, Barranquilla con los desmanes y enfrentamiento entre manifestantes y la policía, afrontó una de las situaciones más difíciles desde el inicio del paro nacional que completó 15 días lleno de multitudinarias manifestaciones pacíficas, pero también de algunos enfrentamientos entre protestantes y fuerza pública.
Anoche se llevó a cabo el partido ante el River, un encuentro lleno de incertidumbre y de alteración del orden público se jugó el partido de Copa Libertadores entre el Junior de Barranquilla y River Plate por la cuarta jornada de la fase de grupos, encuentro que terminó 1-1.
Fue tanto la contaminación del ambiente que los gases lacrimógenos hicieron su tarea e hizo evacuar por varios minutos el gramaje del estadio, donde el árbitro tuvo que detener el partido en el primer tiempo luego de que varios jugadores de ambos equipos se mostraran afectados por gases lacrimógenos que fueron lanzados alrededor del estadio Romelio Martínez.
Por su parte, Marcelo Gallardo, entrenador de River Plate, sin dejar de mostrar su preocupación, fue solidario con la situación que viven los colombianos en medio del paro nacional y aseguró que se jugó en un momento anormal y difícil.
“Si bien era un momento complejo porque uno no se puede abstraer a lo que está pasando, sabíamos que veníamos a jugar intentando que nos den las garantías necesarias. No es normal venir a jugar un partido en una situación tan inestable por lo que está viviendo el pueblo colombiano”, afirmó.
“No fue normal ni en la previa, ni durante el partido. Se jugó en una situación muy incómoda con humo de gases lacrimógenos, escuchando estruendos y estallidos durante varios momentos del encuentro. Una situación anormal en todo el proceso y no podemos mirar para otro lado”, añadió.
D.A.