Durante el consejo de ministros realizado en la Casa de Nariño, el presidente Gustavo Petro sorprendió con una afirmación sin fundamento al referirse a su ausencia en las reuniones de primavera del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM) que se desarrollan esta semana en Washington.
“Yo ya no puedo ir porque creo que me quitaron la visa. No tenía necesidad de tener visa, pero bueno. Ya vi al Pato Donald varias veces, entonces me voy a ver otras cosas”, dijo el mandatario en tono informal, mientras explicaba que el ministro de Hacienda, Germán Ávila, viajó en su representación a la capital estadounidense.
Sin embargo, no existe ningún registro oficial ni confirmación por parte del Departamento de Estado de los Estados Unidos que respalde la afirmación del jefe de Estado. Tampoco se ha reportado una revocatoria de su visa en fuentes diplomáticas o gubernamentales confiables.
La frase, más allá de su aparente liviandad, se suma a una larga lista de declaraciones imprecisas o abiertamente falsas hechas por el presidente Petro en escenarios oficiales, lo que ha encendido nuevamente el debate sobre la responsabilidad comunicativa de quien ostenta la jefatura del Estado.