El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, canceló su visita oficial a Azerbaiyán, programada entre el 7 y el 11 de mayo, debido a la intensificación del conflicto en la Franja de Gaza y el aumento de la tensión en el sur de Siria, donde el Ejército israelí mantiene desplegadas tropas.
Según un comunicado de su oficina, la decisión responde a “una apretada agenda política y de seguridad”, y agradeció al presidente azerí, Ilham Aliyev, por la invitación y las buenas relaciones bilaterales.
Israel contempla expandir combates en Gaza
Medios hebreos reportaron este sábado que el Gobierno israelí considera ampliar los combates en Gaza, donde ya más de dos tercios del territorio se han vuelto inaccesibles para los 2,1 millones de palestinos. Esta situación es consecuencia del ensanchamiento de la zona de amortiguación y nuevas órdenes de evacuación forzosa.
El Foro de Familias de los Secuestrados, que representa a los 59 rehenes que aún permanecen en Gaza, advirtió que una escalada militar pondría en riesgo inminente a los cautivos, vivos o muertos, e instó al Gobierno a buscar una salida negociada. Encuestas recientes señalan que una mayoría de la población israelí estaría dispuesta a detener la ofensiva a cambio de la liberación de los secuestrados.
Tensiones en Siria: despliegue y bombardeos
En paralelo, las fuerzas israelíes intensificaron su presencia militar en el sur de Siria, especialmente en zonas de mayoría drusa, para “impedir la entrada de fuerzas hostiles”, según informaron fuentes castrenses. La situación se agravó tras la difusión de una grabación con insultos al profeta Mahoma, falsamente atribuida a un líder druso, lo que desencadenó violentos enfrentamientos.
Durante los choques, que comenzaron el lunes y se extendieron a zonas como Ashrafieh Sahnaya, el Observatorio Sirio de Derechos Humanos reportó al menos 101 muertos, aunque las autoridades locales aún no han dado cifras oficiales.