El Departamento de Estado de los Estados Unidos confirmó el llamado a consultas del Encargado de Negocios en Colombia, John McNamara, tras lo que calificó como “declaraciones infundadas y reprensibles” por parte de altos funcionarios del gobierno del presidente Gustavo Petro. La decisión fue tomada por el Secretario de Estado, Marco Rubio, como parte de una respuesta más amplia a la creciente tensión en la relación bilateral.
“Además del retiro del Encargado, Estados Unidos está adoptando otras medidas para dejar clara nuestra profunda preocupación por el estado actual de nuestra relación bilateral”, señala el comunicado oficial, citado por medios nacionales e internacionales.
Aunque no se especificaron las medidas adicionales, el llamado a consultas es interpretado como un gesto diplomático contundente ante los recientes pronunciamientos del gobierno colombiano, que en Washington consideran lesivos para una alianza histórica y estratégica.
Sin embargo, el Departamento de Estado reiteró que “Colombia sigue siendo un socio estratégico esencial” y manifestó su disposición a mantener una “estrecha cooperación en diversas prioridades compartidas, como la seguridad y la estabilidad regionales”.