En una contundente ofensiva contra las redes de extorsión que operaban en Barranquilla y su área metropolitana, el Juez 102 Penal de Control de Garantías Ambulante ordenó medida de aseguramiento en centro carcelario para 20 personas, señaladas por la Fiscalía de integrar las estructuras criminales conocidas como ‘Los Pepes’ y ‘Los Costeños’. La decisión fue sustentada por la Fiscal 71 Gaula Especializada, quien presentó ante el despacho judicial los elementos de prueba que vinculan a los capturados con actividades delictivas de alto impacto, subrayando la peligrosidad que su permanencia en libertad representaría para la ciudadanía.
Las capturas fueron reveladas por la Policía Metropolitana de Barranquilla el pasado 9 de mayo, en una rueda de prensa en la que se informó que 18 de los detenidos fueron aprehendidos mediante órdenes judiciales, mientras que los otros dos fueron sorprendidos en flagrancia. Según las autoridades, los capturados venían sembrando el terror en varios sectores de la ciudad mediante amenazas, ataques armados y exigencias económicas a comerciantes formales e informales.
Entre los detenidos figura alias ‘Kener’, quien según la investigación actuaba como jefe de zona y coordinador de sicarios, siendo responsable de múltiples actos intimidatorios que incluían disparos contra establecimientos comerciales para presionar el pago de extorsiones. También fue arrestada alias ‘La Gorda’, señalada como la encargada de cobrar directamente las extorsiones. Otro de los capturados, alias ‘Cachete’, operaba desde un centro penitenciario en La Dorada (Caldas), donde supuestamente seguía coordinando actividades ilícitas a través de llamadas telefónicas. Además, fue asegurado alias ‘Junior’, considerado uno de los cabecillas principales de la organización.
Otras figuras destacadas dentro de esta estructura delictiva son alias ‘Tote’, ‘Negro Zamba’, ‘Chuy’ y ‘El Mello’, identificados como jefes de zona y coordinadores operativos de la red criminal. La Policía detalló que en conjunto, los capturados suman 33 anotaciones judiciales por delitos como extorsión, homicidio, porte ilegal de armas, hurto, concierto para delinquir y violencia intrafamiliar.
Las operaciones criminales de estas bandas se concentraban en el suroriente y el centro de Barranquilla, zonas que presentan alta densidad comercial y donde los comerciantes eran blanco constante de intimidaciones. Entre los capturados están Carlos Alberto Ortiz Blanco, alias ‘Cachete’, con antecedentes por extorsión y homicidio; Edgar Darío Tobón Lozano, alias ‘Junior’, con anotaciones por porte ilegal de armas; Yulianis Andrea Rosillo De La Mata, alias ‘La Gorda’, por concierto para delinquir y extorsión; Kener Rafael Hernández Zúñiga, alias ‘Kener’, por porte de armas y homicidio; Diego Luis Robledo Perea, alias ‘Negro Zamba’, con registros por amenaza; Abelardo Rafael Marriaga Vivero, alias ‘Tote’; Gabriela Cecilia Velilla Sierra, alias ‘Ceci’; José Javier Puello Cortina, alias ‘El Cofla’, con antecedentes por hurto; Jesús Enrique Herrera Cotes, alias ‘Nariz’, por porte ilegal de armas y tráfico de estupefacientes; Hansel Antonio Ebrat Mendoza, alias ‘Care Tabla’, con una larga lista de delitos entre los que se incluyen homicidio, feminicidio agravado y violencia intrafamiliar; Ángel María López Gómez, alias ‘Raspi’, con antecedentes por concierto para delinquir y delitos informáticos; Miguel Antonio Lengua Román, alias ‘El Loco’, por lesiones personales; Luis Alfredo Rojano Mercado, alias ‘Lucho’, por hurto calificado; Erick David González Hernández; Maira Alejandra Escobar Díaz, alias ‘Maleja’, por hurto calificado; Diego Alexander Moncada Durango, por violación de medidas sanitarias; Néstor Humberto Gale Pérez, por violencia intrafamiliar y hurto; Carlos Abraham Marín Navas, alias ‘Carlitos’, por extorsión; Juan José Medina Querales, con anotaciones por porte de armas de uso privativo de las fuerzas armadas; y Jhon Henry Insignares Vera, alias ‘Jhon’, con antecedentes por concierto para delinquir, abuso de confianza y porte de armas.
La operación representa un fuerte golpe a las finanzas y a la estructura criminal de estas bandas, que durante años han ejercido control violento sobre sectores estratégicos de Barranquilla, afectando gravemente la seguridad ciudadana y la economía local. La Fiscalía y la Policía han reiterado su compromiso de continuar desarticulando estos grupos, avanzando en investigaciones que buscan identificar a otros miembros y estructuras de apoyo involucradas en esta red criminal.