Daneidy Barrera Rojas, conocida como Epa Colombia, fue trasladada de la cárcel El Buen Pastor a la Escuela de Carabineros en Bogotá, luego de que el Ministerio de Justicia y el Inpec determinaran que existían amenazas contra su vida y dificultades para recibir atención médica en el centro penitenciario.
El ministro de Justicia, Eduardo Montealegre, explicó que la medida respondió a riesgos comprobados contra la integridad de la influenciadora y rechazó que se trate de un privilegio. “Los abogados de Epa Colombia desde hace varias semanas habían hecho solicitudes al gobierno nacional para un cambio de reclusión… alegan razones de seguridad, de amenazas contra su vida, contra su integridad”, señaló en entrevista con Blu Radio.
La decisión se concretó gracias a un cupo habilitado por el Ministerio de Defensa en la institución policial, tras las solicitudes de su defensa, encabezada por el abogado Francisco Bernate.
Montealegre enfatizó que estos traslados son habituales cuando un detenido enfrenta riesgos graves, independientemente de si es una figura reconocida públicamente. “Ella tiene en primer lugar y la razón fundamental para el traslado es que tiene problemas de seguridad”, indicó.
El funcionario aprovechó además para advertir sobre la crisis del sistema penitenciario, recordando que cerca de 20.000 personas permanecen recluidas en estaciones de policía por falta de cupos en las cárceles. Señaló que esta situación es reflejo de un problema estructural marcado por el hacinamiento y una política criminal equivocada.
En relación con la condena de 5 años y 2 meses impuesta a Barrera por la destrucción de una estación de TransMilenio en 2019, Montealegre afirmó que se trata de una pena desproporcionada. “La condena que se le impuso a Epa Colombia es supremamente alta, no se corresponde, no es proporcional a la gravedad de los hechos”, sostuvo.