La Fiscalía General de la Nación ocupó con fines de extinción de dominio dos inmuebles en Medellín (Antioquia) que habrían sido adquiridos con dineros del narcotráfico por exintegrantes del Cartel de Medellín.
De acuerdo con la investigación, uno de los bienes estaría relacionado con Sebastián Alzate Urquijo, alias “El arete” (antes Carlos Mario), quien fue jefe de sicarios de la organización y amasó fortunas ilícitas mediante el envío de cocaína a Estados Unidos y la ejecución de acciones terroristas. La propiedad figura a nombre de una persona cercana a él.
El otro predio corresponde a un edificio en el barrio Aranjuez, del cual Roberto de Jesús Escobar Gaviria, alias “El osito” y hermano del extinto capo Pablo Escobar, adquirió el 50% en 1979. Según la Fiscalía, los recursos utilizados para la transacción provendrían igualmente de operaciones ilegales.
Las autoridades establecieron que tanto “El arete” como “El osito” participaron en la consolidación financiera del cartel, valiéndose de familiares y terceros para ocultar activos y legalizar recursos ilícitos.
Por decisión de un fiscal de la Dirección Especializada de Extinción del Derecho de Dominio, los inmuebles, avaluados en más de $1.000 millones, quedaron bajo medidas cautelares de suspensión del poder dispositivo, embargo y secuestro, las cuales fueron ejecutadas por la Policía Nacional.