Este lunes vence el plazo para que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anuncie si certifica o descertifica al gobierno de Gustavo Petro en la lucha contra las drogas, una decisión que podría traer consecuencias económicas, diplomáticas y de seguridad para Colombia.
De no recibir la certificación, el país se enfrentaría a la suspensión de cooperación y asistencia, restricciones comerciales, bloqueos en créditos multilaterales, congelación de activos y un aumento en el riesgo país que encarecería el endeudamiento externo. Según AmCham Colombia, el turismo podría perder hasta 1.000 millones de dólares anuales y la inversión extranjera vería un fuerte impacto.
El ministro del Interior, Armando Benedetti, afirmó que Colombia ha cumplido con una “lucha clara y transparente contra el narcotráfico” y que una descertificación sería “unilateral y penosa”, favoreciendo únicamente a las mafias.
Desde Washington, el congresista demócrata Gregory Meeks pidió al mandatario conceder una exención para Colombia, recordando que en 2024 el país incautó cerca de 1.000 toneladas de cocaína, el 65 % de lo decomisado en el mundo.
Por su parte, la precandidata presidencial Susana Muhammad señaló que el enfoque debe centrarse en pactar con el campesinado y atacar las estructuras criminales y financieras del narcotráfico, mientras que el general (r) Óscar Naranjo advirtió que una descertificación podría derivar en una vigilancia condicionada más que en un recorte inmediato de presupuestos.
La decisión de Trump será determinante para definir el rumbo de la relación bilateral en uno de los temas más sensibles de la agenda compartida: la política antidrogas.