El Caribe vive horas de angustia. El huracán Melissa, ahora convertido en un poderoso ciclón categoría 4, continúa su avance con rumbo hacia Jamaica, donde se esperan lluvias torrenciales, inundaciones y vientos devastadores.
El Centro Nacional de Huracanes (NHC) de Estados Unidos informó este domingo que el ojo del huracán se ubica a unos 195 kilómetros al sur-sureste de Kingston, con vientos sostenidos de 220 km/h y ráfagas aún más fuertes. Los meteorólogos advierten que podría fortalecerse aún más antes de tocar tierra entre la noche del lunes y la mañana del martes.
Las autoridades jamaiquinas han decretado alerta máxima y piden a los habitantes buscar refugio. “La furia de Melissa golpeará toda la isla, no subestimemos su fuerza”, advirtieron voceros del gobierno.
Mientras tanto, Haití, República Dominicana y el sureste de Cuba se preparan para lluvias torrenciales y posibles deslizamientos de tierra. El NHC estima acumulaciones de entre 380 y 760 milímetros de agua, con zonas que podrían superar los 1.000 milímetros, lo que elevaría el riesgo de inundaciones catastróficas.
Melissa ya ha dejado tres muertos en Haití y millones sin agua potable en República Dominicana, donde cientos de familias fueron evacuadas por el desbordamiento de ríos.
Los expertos prevén que tras su paso por Jamaica, el huracán se dirija hacia Cuba y las Bahamas, manteniendo su potencia y capacidad destructiva.
Con Melissa, ya son 13 los ciclones registrados en la actual temporada de huracanes del Atlántico, una de las más activas de los últimos años.
🌧️ Recomendación oficial: las autoridades insisten en mantenerse informados, evitar desplazamientos innecesarios y acatar las órdenes de evacuación ante el paso del fenómeno.








