Tras una tutela de la Corte Suprema de Justicia, la Unidad Anticorrupción de la Fiscalía decidió imputar cargos a Luis Fernando Acosta Osio, empresario barranquillero y cabeza del grupo que controla la Universidad Metropolitana y el Hospital Metropolitano. La imputación será por los delitos de cohecho y tráfico de influencias, dentro del mismo expediente que llevó a la cárcel al exsenador Eduardo Pulgar.
Acosta Osio, junto con su hermano Juan José, fue mencionado en las grabaciones del entonces senador Pulgar, quien intentó sobornar con “200 millones de pesos” al juez de Usiacurí, Andrés Rodríguez Caes, para que fallara a favor de los Acosta en un proceso de tutela. El juez, que grabó la conversación, terminó exiliado, mientras Pulgar fue condenado y cumplió su pena.
Pese a que el caso lleva años en la Fiscalía, el empresario había logrado evitar su imputación debido a los reiterados cambios de fiscales encargados. En cuatro ocasiones, la audiencia fue suspendida a última hora.
La Corte Suprema, tras estudiar una tutela presentada por Ivonne Acosta —contraparte del empresario en el litigio por el control de la Universidad y el Hospital Metropolitano—, ordenó a la Fiscalía decidir de fondo. Finalmente, el ente acusador citó para el próximo miércoles 29 de octubre la audiencia de imputación.
En medio del proceso, la abogada Claudia Patricia Cristancho, defensora del hermano de Acosta, renunció denunciando que “la estaban involucrando en actos de corrupción”. Por su parte, el representante de las víctimas, Raúl Rafael Romero, rechazó los intentos de Acosta Osio por vincularlo falsamente al escándalo y reiteró su compromiso con la verdad.
Acosta Osio amplió recientemente su equipo jurídico, incorporando al exmagistrado de la Corte Suprema Luis Hernández, quien fue figura clave en la elección de la actual fiscal general, Luz Adriana Camargo.








