Por: Yasher Bolívar Pérez
Sebastián Villa vivió una noche soñada en el fútbol argentino. El delantero colombiano se convirtió en héroe al marcar el penal decisivo que le dio a Independiente Rivadavia de Mendoza el título de la Copa Argentina 2025, el primero en los 112 años de historia del club. Su actuación fue clave en una final llena de emoción ante Argentinos Juniors.
El encuentro tuvo todos los ingredientes de un partido inolvidable: goles tempraneros, expulsiones y un desenlace de infarto. Rivadavia, que llegó a estar con nueve jugadores, vio cómo su rival empataba en los últimos minutos. Pero en la tanda de penaltis, Villa mantuvo la calma y selló el triunfo que desató la euforia en Mendoza.
Con este logro, Villa vuelve a saborear la gloria en el fútbol argentino, donde ya había ganado la Copa con Boca Juniors en 2019. Ahora, su nombre queda grabado en la historia de Rivadavia, no solo por el título, sino por darle a toda una provincia una alegría que quedará para siempre en la memoria de sus hinchas.









