La Sala de Justicia y Paz del Tribunal Superior de Bogotá condenó a 35 exintegrantes de los bloques Calima y Bananero de las extintas Autodefensas Campesinas de Córdoba y Urabá, tras acreditar su responsabilidad en 345 hechos delictivos cometidos en Valle del Cauca, Antioquia, Cauca, Huila y Quindío.
Entre los sentenciados se encuentran Hebert Veloza García, alias HH; Juan Mauricio Aristizábal, alias Fino; Dalson López Simanca; Janier Franco; Albeiro Antonio Úsuga, alias Robinson; Germán Enrique Pineda y Rover Enrique Oviedo, entre otros.
Los fallos documentan masacres como las de San Pedro, Chorreras, San Lorenzo y Piedritas, esta última ocurrida en zona rural de Tuluá en 1999, en la que murieron 13 personas, hubo desplazamiento masivo y dos mujeres fueron víctimas de violencia de género y tortura. También se atribuye al Bloque Bananero la masacre de Acandí (Chocó) en 1995, que dejó seis muertos, secuestros, torturas y el desplazamiento de más de 30 familias.
Las decisiones judiciales también reconocen el apoyo de algunos empresarios y miembros de la fuerza pública en la expansión de estos grupos armados, así como patrones de macrocriminalidad como homicidio, desaparición forzada, violencia basada en género, reclutamiento y desplazamiento forzado.
Los condenados recibieron penas ordinarias de entre 240 y 480 meses de prisión, junto con penas alternativas de ocho años bajo la Ley de Justicia y Paz. Además, deberán pagar multas que oscilan entre 9.000 y 58.000 salarios mínimos legales mensuales vigentes.









