Por: Yasher Bolívar Pérez
La Selección Colombia despidió el 2025 con una sonrisa amplia y un estadio en Nueva York que vibró con cada jugada. El equipo de Néstor Lorenzo, ya clasificado al Mundial 2026, necesitaba cerrar el año mostrando solidez, y lo hizo con una goleada 3-0 ante Australia. Aunque el partido arrancó trabado y sin claridad, poco a poco los jugadores fueron encontrando su ritmo en una cancha incómoda y estrecha, adaptada de un diamante de béisbol.
El primer tiempo dejó más dudas que certezas: Colombia no lograba descifrar la presión australiana y apenas generó peligro. Sin embargo, las cosas cambiaron en la segunda mitad. James Rodríguez abrió el marcador desde el punto penal, recordando por qué sigue siendo un líder natural en la cancha. Después, Luis Díaz aprovechó un error del portero para ampliar la ventaja y Jefferson Lerma, sobre el final, selló la goleada con un gol que celebró todo el banquillo.
El triunfo no solo cierra un año competitivo, sino que alimenta la ilusión de un grupo que ha recuperado confianza y regularidad. Con un balance positivo y figuras en buen nivel, la Selección viaja al 2026 con la sensación de estar construyendo algo grande. Los hinchas, que llenaron el estadio neoyorquino, despidieron al equipo entre aplausos y una certeza: Colombia vuelve a creer.









