El contrato en mención quedó suspendido a esperar de una solución a las posibles irregularidades halladas.
Así lo dio a conocer este mediodía la Sociedad de Activos Especiales (SAE), donde anunció que no cederá acciones de Triple A al Distrito de Barranquilla hasta que no haya total claridad sobre presuntas irregularidades por parte de los organismos de control.
Asimismo la Sociedad de Activos Especiales – SAE aprovechó para suspender la venta de Triple A como resultado de un estudio de valoración por parte de la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios.
La rueda de prensa se llevó a cabo en la capital del país, por el caso de la empresa Triple A de Barranquilla y contó con la presencia del presidente de la SAE y el Superservicios, donde se informó por parte de la SAE de abstenerse de continuar con el proceso de la cesión del 82,16% de las acciones de la Triple A que están en manos de la SAE, por presuntas irregularidades en el contrato de cesión de las acciones.
Según estudio de valoración de los activos de Triple A, está en el orden de los 2,4 billones de pesos. La adquisición del 82,16% de la acciones de la empresa por Alumbrado Público en el contrato es por 565 mil millones de pesos.
“La Superservicios nos ha sugerido una suspensión temporal del contrato hasta que la Contraloría, que nos ha citado el 14 de enero para esclarecer el contrato, no tenga una decisión en firme, y como la SAE no puede suspender unilateralmente el contrato, nuestra decisión es la de abstenernos de ceder la participación accionaria”, sostuvo el presidente de la SAE, Daniel Roja Medellín durante una rueda de prensa.

Por su parte, el superintendente de Servicios Públicos Domiciliarios, Dagoberto Quiroga, indicó que la SAE pidió desde el mes pasado una valoración de la Triple A y “se encontraron presuntas violaciones al ordenamiento jurídico”.
“Por eso se le ha solicitado a la SAE la posibilidad de entrar a hablar con otro contratante a fin de revisar todos los cuestionamientos jurídicos y económicos que encierra el contrato”, agregó Quiroga.
De esta manera, el contrato quedó suspendido al advertir que el proceso de enajenación de la empresa de acueducto, aseo y alcantarillado de Barranquilla, debió realizarse por subasta pública y no por un contrato de compra y venta de acciones como se dio entre la SAE y Alumbrado Públicos de la capital del Atlántico por un valor de 565 mil millones de pesos.
“Vimos que usaron el mecanismo de la venta temprana cuando la ley establece el mecanismo de este tipo de venta como algo excepcional y por eso consideramos que puede encerrar desconocimiento de principio de transparencia. En todas las actuaciones de los servidores públicos están obligados a respetar los principios consternados en la Constitución nacional para el desarrollo de la gestión pública y dentro de ello está el principio de transparencia”, enfatizó el superintendente de Servicios Públicos.
“Consideramos que no ha sido tan transparente la negociación que se ha hecho, pues por las observaciones que hemos hecho en la carta que enviamos a la SAE recomendando la necesidad de suspender la continuidad del trámite de enajenación hasta que los órganos de control y las partes se sienten y evalúan las presuntas irregularidades contenidas en el contrato”, puntualizó.
En dicha carta, la Superintendencia afirmó que la participación pública se redujo en un 23%, mientras que la del sector privado aumentó en este mismo porcentaje.
Cabe destacar que la Alcaldía de Barranquilla busca adquirir el 82.16 % de las acciones, a través de la empresa Alumbrado Público de Barranquilla (APBAQ).