El hoy Papa León XIV, antes conocido como Robert Francis Prevost, no es un desconocido para la ciudad de Barranquilla.
Mucho antes de ser elegido como el primer papa estadounidense y uno de los pontífices más cercanos a América Latina, el entonces prior general de la Orden de San Agustín visitó la capital del Atlántico en dos oportunidades: en 2002 y en 2007.
Estas visitas, realizadas durante su gestión como superior general de los agustinos (2001-2013), dejaron una huella en la comunidad educativa del Liceo Cervantes, donde compartió con estudiantes y religiosos, y dejó mensajes que hoy cobran nuevo sentido bajo su rol como líder de la Iglesia católica.
Del año 2002 queda el registro fotográfico en el anuario escolar del Liceo, donde se ve a un joven Prevost con su ya característica sonrisa. Acompaña su imagen una frase que ahora parece premonitoria: “Nuestra referencia es Cristo, camino, verdad y vida; pasado, presente y futuro de la historia que hemos de anunciar con el lenguaje y con la vida para que la buena noticia del evangelio despierte interés y mucho amor.”
Su relación con Barranquilla no terminó ahí. En 2009, aún como prior general, el ahora pontífice oficializó la creación canónica de la Fraternidad Secular Agustiniana “San Agustín”, también en el colegio Liceo Cervantes.
Con estos antecedentes, el nombramiento de León XIV ha sido recibido con especial emoción en Barranquilla, donde se le recuerda como un pastor cercano, espiritual y profundamente comprometido con la formación de jóvenes en valores agustinianos.