Luego de cerca de cinco semanas de iniciado el paro nacional, donde han predominado las manifestaciones y alteración del orden público en el país con graves episodios de vandalismo, el partido Centro Democrático criticó a varios senadores de la oposición por presuntos actos de violencia contra el Estado.
Los congresistas blancos de estas críticas ante el gobierno norteamericano, fueron los senadores Gustavo Petro, Gustavo Bolívar e Iván Cepeda, a quienes el partido del gobierno, cuya cabeza visible es la senadora María Fernanda Cabal, planteó durante su visita a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), en ciudad de Washington, EE. UU.
Así fue como el Centro Democrático realizó un informe de 64 páginas con 243 acusaciones. Allí se recopilaron presuntos discursos de odio y actos que habrían atentado contra la fuerza pública y los bienes del Estado en el marco de las protestas por el paro nacional.
Incluso, el informe, ahora en manos de la CIDH, contiene varias citas textuales de trinos y pantallazos de mensajes en redes sociales, no solo de los tres senadores de la oposición, también de periodistas como Gonzalo Guillén, quienes según ellos habrían generado discursos de odio contra el Centro Democrático y el uribismo.
D.A.