Aunque están dadas las garantías para el regreso presencial, son varias las dudas que los padres expresan frente a este proceso.
Los niños que no asistan, no perderán su beneficio de alimentación.
En Colombia arrancó el proceso de retorno gradual y seguro a las instituciones públicas y la normalización de la educación presencial en los colegios.
Bogotá hace parte de las ciudades que cuenta con un gran avance en materia de vacunación de docentes contra la Covid, al igual que en la adecuación de colegios para la prestación del servicio de educación, con medidas de bioseguridad.
Sin embargo, varios padres de familia han expresado preocupación sobre los riesgos de enviar a sus hijos a los colegios en medio de las altas cifras de Covid que se registran en el país y dudas frente a las medidas tomadas para el retorno a los colegios. Los padres de familia aseguran que en algunas instituciones hay desinformación e, incluso, dicen que hay presunta manipulación para obligar a los estudiantes a asistir presencialmente, “irrespetando la decisión de cada familia de enviar o no a sus hijos, teniendo en cuenta las cifras de coronavirus”.
Una de las mayores incógnitas que hay entre varios padres de familia tiene que ver con la obligatoriedad de iniciar presencialidad, lo cual fue aclarado desde la Secretaría de Educación de Bogotá, entidad que advirtió que pese a que todas las garantías de bioseguridad están dadas, las instituciones y sus directivas deben respetar la decisión de los padres que no autoricen enviar sus hijos aún a las aulas.
La Secretaría de Educación detalló que “entre 2020 y 2021, como preparación para el regreso a la presencialidad, el Distrito ha realizado 379 intervenciones a 269 sedes educativas, que incluyen el mejoramiento, arreglo o reemplazo de cubiertas, baterías sanitarias, sistemas hidráulicos, cerramientos, áreas recreativas, redes de aguas lluvias y sanitarias, para garantizar el cumplimiento de medidas de bioseguridad en las instituciones oficiales, como la ventilación, el distanciamiento y el lavado de manos”.
¿Beneficio de alimentación escolar se pierde?
Sobre el tema de alimentación escolar que se ofrece a los estudiantes de colegios públicos, la Secretaría de Educación aclaró que no se ha dicho que se le vaya a negar o a quitar este derecho a los estudiantes que no asistan presencialmente; sin embargo, aclaró que con el paso de los meses se normalizará la entrega de comida caliente y/o refrigerios escolares directamente en las instituciones, lo cual en la actualidad aplica a través de bonos de supermercado.
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“Mientras se establecen las condiciones para retomar los servicios de comida caliente y/o refrigerios escolares durante la jornada académica, las niñas, niños y jóvenes continuarán recibiendo el bono y la canasta alimentaria, modalidades transitorias que se implementaron durante la pandemia”, explicó la secretaria de Educación.
“Asimismo, el bono y la canasta alimentaria, modalidades transitorias que se implementaron durante la pandemia, serán entregados en el mes de julio”, se detalló.
Durante la segunda semana de julio, la Dirección de Bienestar Estudiantil coordinará con cada una de las instituciones educativas el proceso de reapertura de la operación de los comedores escolares o el servicio de entrega de refrigerios escolares, a partir de los protocolos establecidos y definidos por la Secretaría de Educación del Distrito.
¿Cómo se movilizarán los estudiantes al colegio?
En lo que tiene que ver con movilidad escolar, los estudiantes que lo requieran podrán continuar recibiendo beneficios como ruta escolar, subsidio de transporte, o hacer parte de los programas de ‘Al colegio en bici’ y ‘Ciempiés’.
Los beneficiarios de las cuatro modalidades del Programa de Movilidad Escolar estarán activas en la presencialidad y contarán con las medidas de bioseguridad, conforme a la normatividad recientemente expedida por el Ministerio de Salud y Protección Social.
D.A.