Durante la jornada, se socializaron ante congresistas y expertos del sector las labores desarrolladas desde dicha cartera en el marco de las estrategias nacionales para prevenir, diagnosticar y tratar esta enfermedad. Asimismo, se resaltaron los esfuerzos interinstitucionales, pero también se hizo un llamado urgente a redoblar el compromiso político y financiero para atender a los menores diagnosticados con cáncer.
El panorama expuesto es alarmante: en 2025, se proyectan 280.000 casos de cáncer infantil a nivel global, y en Colombia se ha evidenciado un aumento del 125,1% en los últimos cinco años, con más de 13.000 casos registrados solo en 2024. Aunque la tasa de supervivencia en países de altos ingresos supera el 80%, en naciones como Colombia apenas alcanza el 30%. Para algunos representantes, a pesar del anuncio de proyectos anunciados por el ministro, como el de inversión para tres buques hospitales para la vida, y programas de capacitación para el personal médico, persisten grandes retos relacionados con el acceso a servicios especializados.
Para la representante Martha Alfonso hay un asunto importante por solucionar y es el de atención a las PQR de los pacientes, y pidió mejoras en ese sentido. Por su parte, el representante Hugo Archila enfatizó que “el cáncer infantil no puede seguir siendo una estadística fría”, e instó a priorizar la salud de la niñez con políticas sostenibles, inversión en investigación y estrategias de atención temprana.
En línea con la iniciativa Global para el Cáncer Infantil de la OMS, Colombia tiene el reto de alcanzar una tasa de supervivencia del 60% para 2030, un objetivo posible solo si logran consolidarse los compromisos por parte del Estado.