El menor de 17 años que participó en la planeación del atentado contra el senador Miguel Uribe y que luego escapó de un centro del ICBF en Bogotá, es una pieza clave para la Fiscalía en el esclarecimiento del caso.
Según reveló la revista Semana, el adolescente, conocido como ‘El Ñero’, se entregó voluntariamente y confesó que había sido contactado por Élder José Arteaga, alias el Costeño, señalado como autor intelectual del ataque, para ejecutar el crimen ocurrido el 7 de junio en Bogotá.
El joven relató que estuvo presente en varias reuniones de planeación y que, inicialmente, aceptó ser el sicario, pero se arrepintió días antes del atentado al considerarlo una “misión suicida”. Aun así, reveló que el Costeño insistía en usar menores de edad asegurando que, si eran capturados, no irían a prisión sino al ICBF.
De acuerdo con El Tiempo, el menor salió de Bogotá hacia Tulcán, Ecuador, un día antes del atentado. Ante su ausencia, el Costeño habría reclutado rápidamente a otro adolescente para reemplazarlo.
El joven regresó días después con la intención de colaborar con la justicia, pero al no ser considerado testigo protegido, fue enviado a un centro del ICBF como “migrante no acompañado”. Tres días después, se escapó del lugar.
El testimonio del menor confirma que el atentado fue planeado con al menos cuatro meses de anticipación y podría ser determinante en las nuevas capturas que prepara la Fiscalía.