El Tribunal Superior de Bogotá definirá este martes si mantiene, reduce o revoca la condena a 12 años de prisión domiciliaria contra el exmandatario por soborno y fraude procesal.
El país político y judicial está a la expectativa del fallo que este martes dará a conocer el Tribunal Superior de Bogotá sobre la condena a 12 años de prisión domiciliaria impuesta al expresidente Álvaro Uribe Vélez (2002–2010) por los delitos de fraude procesal y soborno en actuación penal.
Uribe, líder del Centro Democrático, se convirtió el pasado 1 de agosto en el primer expresidente de Colombia condenado penalmente, tras la decisión de la jueza Sandra Heredia, del Juzgado 44 Penal del Circuito de Bogotá.
La decisión que conocerán las partes este martes fue adoptada la semana pasada y responde a las apelaciones presentadas por la defensa del exmandatario y por la Procuraduría General de la Nación, que consideran que el fallo de primera instancia “carece de fundamentos jurídicos”.
Lo que está en juego
El fallo del Tribunal Superior podría confirmar, modificar o revocar la condena. En caso de ratificarla, el proceso aún podría llegar a la Corte Suprema de Justicia, instancia que tendría la última palabra.
Juristas consultados señalan que el Tribunal podría reducir la pena, si decide mantener solo uno de los delitos, o incluso absolverlo, dependiendo de la valoración de las pruebas.
El expresidente, que permanece en libertad desde septiembre por decisión del mismo Tribunal, enfrenta este tramo del proceso mientras continúa participando activamente en la política.
Un caso que marcó la historia judicial
El proceso contra Uribe se remonta a 2012, cuando demandó al entonces representante Iván Cepeda ante la Corte Suprema de Justicia por supuesta manipulación de testigos. Sin embargo, el alto tribunal no solo absolvió a Cepeda, sino que abrió una investigación contra Uribe, al hallar indicios de que el expresidente habría presionado testigos para desvirtuar sus presuntos vínculos con grupos paramilitares.
En paralelo, el abogado Diego Cadena, quien representó a Uribe, fue condenado a siete años de prisión domiciliaria por soborno en actuación penal, en un caso directamente relacionado con el expediente del expresidente.
Uribe no se aparta de la política
Pese al proceso, Uribe mantiene su protagonismo político. Buscará volver al Congreso en 2026 como candidato número 25 en la lista cerrada al Senado por el Centro Democrático y trabaja en la construcción de una alianza de derecha con miras a las elecciones presidenciales del 31 de mayo de 2026.