La muerte violenta del senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay ha dejado un profundo vacío en su familia y en el país. Su hermana, María Carolina Hoyos, rompió el silencio para recordar con dolor el último día que lo vio.
En entrevista con *W Radio*, Hoyos relató que la última vez que se encontraron fue en una cena en la casa del congresista:
> “Yo lo agarraba, le daba besos. Era más alto que yo, pero yo lo sentía como mi niñito chiquito. Estoy segura de que él se va al cielo sabiendo que yo me derretía por él porque pude decírselo”, expresó entre lágrimas.
María Carolina fue una figura maternal para Miguel desde que, a los cuatro años, él perdió a su madre, Diana Turbay, asesinada en 1991 durante su secuestro.
Tras el magnicidio, compartió un emotivo mensaje en redes sociales:
> “Miguel Guerrero, esta fue la voluntad de Dios. No encuentro explicaciones, pero no me queda más que asumir este nuevo dolor con fe… Estoy segura de que nuestra mamá te recibe con los brazos abiertos”.
La tragedia reabrió viejas heridas en la familia Turbay. Señal Memoria rescató un video de 1990 en el que un pequeño Miguel Uribe pedía la liberación de su madre:
> “Mamita linda te quiero, ven pronto. Te mando muchos besos”, decía el entonces niño, sin saber que meses después ella sería asesinada.