La primera dama Verónica Alcocer ha recibido varías críticas luego de una investigación de la Silla Vacía en la que se revela “su extravagante séquito”, al contar con maquillador personal, vestuarista, fotógrafo profesional y una asesora que la acompañan en el cumplimiento de su agenda.
Todas estas personas, según ese medio de comunicación, tienen salarios entre los 10 y 30 millones de peso, generando un costo para el Estado de más de mil millones.
Los “excesos” de la esposa del presidente, Gustavo Petro, tuvieron eco en el Congreso. La oposición anunció que citará a debate de control político a varios funcionarios, entre ellos, al consejero de la reconciliación, Álvaro González.
De esa dependencia que antes estaba liderada Eva Ferrer, amiga personal de la primera dama, han salido los recursos invertidos desde el Gobierno en la imagen de Alcocer.
“La primera dama Verónica Alcocer no se puede citar a debate de control político, toda vez que no es funcionaria pública, pero sí citaremos a los funcionarios públicos que se están gastando la plata de los colombianos pagando excentricidades en la esposa de Gustavo Petro con la plata de los colombianos”, dijo el representante Juan Espinal, del Centro Democrático.
Otros congresistas también han cuestionado al Gobierno por la promesa “de cambio” que hicieron en campaña y por el mensaje de austeridad que en varias ocasiones ha enviado el mismo jefe de Estado.