El presidente de Colombia, Gustavo Petro, anunció este jueves que en los próximos días va a haber un cese al fuego multilateral pactado con varios grupos armados que se han acercado al Gobierno en su proyecto de «paz total».
«En cuestión de días también se va a plantear un tema público, la posibilidad de un cese multilateral del fuego que sería el inicio del fin de la violencia en Colombia», dijo Petro en una declaración a medios en Nueva York donde está de visita para participar en la Asamblea General de la ONU.
Este cese al fuego implica a varios grupos que se han acercado en las últimas semanas al Gobierno, dijo el mandatario pero no dio detalles de cuáles ni cuántos.
¿Qué grupos armados ilegales han mostrado su disposición de unirse a la paz total planteada por el Gobierno?
El comisionado de Paz, Danilo Rueda, reveló días atrás que la Segunda Marquetalia “ha manifestado su disposición a hacer parte de la paz total” como “lo ha hecho una estructura armada conocida” como Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), que es la principal banda criminal del país y se le conoce también como Clan del Golfo.
El comisionado reveló, además, que ha tenido reuniones exploratorias con los disidentes “en un lugar de Colombia que ya el país conocerá”.
Desde su llegada a la Presidencia, Petro propuso la “paz total”, una ambiciosa apuesta para llevar a la mesa de negociación a los grupos al margen de la ley que todavía operan en el país.
La idea es lograr con la guerrilla del ELN un acuerdo como el que se alcanzó en su momento con las Farc, y con las bandas criminales y disidencias, algún tipo de arreglo jurídico o de sometimiento a la justicia.
Al respecto, el presidente Petro indicó que las organizaciones narcotraficantes “ya se están dando cuenta que un camino probable es el de negociar con la justicia”.
“Ojo con ese término, porque ya no estamos hablando de poderes políticos, con la justicia, caminos de beneficio jurídico para finalizar su actividad”, agregó.
Es por esto que, reveló el presidente, “todas esas organizaciones, con nombres que ya no alcanzan, hay que hacer ya un diccionario para entender todo ese laberinto de organizaciones multicrimen, algunos de vieja data y la inmensa mayoría de nuevo origen, han mandado cartas para abrir negociaciones para un desmantelamiento. Incluso, algunas diciendo que quieren apostarle a la visión de revitalizar la selva desde donde están”.