El plan del Gobierno para controlar la población de hipopótamos en Colombia sigue sin avances concretos, lo que podría llevar a que la especie invasora alcance los 1.000 ejemplares para 2035, según alertó Germán Jiménez, investigador en manejo y conservación de fauna silvestre de la Universidad Javeriana de Bogotá.
A pesar de que en septiembre de 2023 el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible presentó un plan para reducir el número de estos animales en el Magdalena Medio, hasta el momento no se han implementado acciones significativas. El plan incluye medidas como la translocación, la esterilización quirúrgica, el confinamiento y, como último recurso, la eutanasia con altos estándares de bienestar animal.
“No ha pasado nada. Se sancionó un plan, pero no ocurrió nada”, afirmó Jiménez a propósito del Día Internacional del Hipopótamo, que se celebra cada 15 de febrero. Recientemente, el investigador visitó la región y aseguró que no observó ninguna actividad que indique que el plan está en marcha.
Los hipopótamos fueron introducidos en los años 80 por el narcotraficante Pablo Escobar en su Hacienda Nápoles. Tras su muerte en 1993, los animales escaparon y encontraron en la región del Magdalena Medio un hábitat ideal para su reproducción sin control. Su presencia supone una amenaza para la fauna local, la seguridad de los habitantes y los ecosistemas.
Si el Gobierno no implementa medidas urgentes, advierte Jiménez, los hipopótamos seguirán multiplicándose, aumentando el riesgo de tráfico ilegal de crías e incluso la expansión de la especie a otras zonas del país.