Salvatore Mancuso, exjefe paramilitar de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) y actualmente gestor de paz, se retractó de las acusaciones que había formulado contra el expresidente Álvaro Uribe Vélez en relación con el asesinato del exalcalde de El Roble, Sucre.
Mancuso presentó ante la Fiscalía una propuesta de conciliación en la que pidió disculpas al exmandatario por los señalamientos hechos previamente en la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) y en un comunicado público. Tales afirmaciones motivaron una querella por injuria y calumnia interpuesta por Uribe, quien sostuvo que el exparamilitar lo relacionó sin pruebas con actividades criminales de las AUC.
Durante su comparecencia en el proceso, Mancuso manifestó su intención de conciliar y reconoció que los hechos que había señalado “no le constan”. En el documento entregado a la Fiscalía, afirmó no tener evidencia que vincule al expresidente con el homicidio de Eudaldo León Díaz, alcalde de El Roble asesinado por paramilitares en 2003.
“Manifiesto que no me consta que el doctor Álvaro Uribe Vélez hubiera participado en la lamentable acción criminal perpetrada por las AUC que acabó con la vida del señor Eudaldo León Díaz”, indicó Mancuso en su declaración escrita.
La Fiscalía programó para el 4 de diciembre la diligencia en la que los representantes legales de Uribe evaluarán si la propuesta de conciliación cumple los requisitos legales y resulta suficiente para reparar el daño causado.
Mancuso reiteró que continuará aportando a los procesos judiciales dentro de los límites de la ley, pero insistió en que no le consta ninguna participación directa o indirecta del expresidente en los hechos mencionados en la querella.









