Una vez más, el Congreso de la República frustró el intento de reducir el salario de senadores y representantes. El proyecto de ley, impulsado por los congresistas Iván Cepeda y María José Pizarro, se hundió en la Plenaria del Senado ante la falta de quórum, lo que impidió avanzar con la votación.
La iniciativa había sido priorizada en el orden del día, pero, según denunció Cepeda, una serie de impedimentos y la salida del recinto de varios senadores paralizaron el debate. “Hoy, a pesar de que con una proposición logramos subirlo al primer lugar del orden del día, una lluvia de impedimentos y el abandono del recinto de muchos senadores acabó con el quórum», escribió el legislador en su cuenta de X. Cepeda aseguró que algunos senadores calificaron la propuesta como “una iniciativa populista del Gobierno”.
El senador fue enfático al señalar la incongruencia en la actitud de sus colegas: «Los senadores, a la hora de lesionar los derechos de los trabajadores, son implacables, y a la hora de mantener sus privilegios son permisivos y ausentistas».
Actualmente, los congresistas reciben un salario mensual de $52 millones, tras un ajuste retroactivo aplicado desde enero. Para 2025, el aumento salarial fue de $3 millones.
La senadora María José Pizarro también criticó la falta de voluntad política para aprobar una medida que, según ella, habría representado un gesto mínimo de compromiso frente a la desigualdad social en el país. “Los legisladores perdieron una inmensa oportunidad de dar ejemplo, cuando nosotros ganamos 40 o 100 veces lo que gana una persona del común, que recibe entre $400 mil y un millón de pesos”, afirmó.
Este proyecto es apenas el último de una larga serie de intentos fallidos. Desde 2015, más de diez iniciativas similares han fracasado en el Congreso.
El senador Jota Pe Hernández, quien apoyaba el proyecto, cuestionó el momento en que fue impulsado. “Les conviene decirle a los colombianos que están luchando por bajarse el salario, a pesar de que en tiempos anteriores esos mismos legisladores no movieron un dedo. Ahora lo hacen justo cuando el periodo legislativo está por terminar», señaló.