El Servicio Geológico Colombiano (SGC) informó este miércoles, 10 de diciembre, que el volcán Puracé, ubicado en el departamento del Cauca y perteneciente a la cadena volcánica Los Coconucos, continúa en estado de alerta naranja debido a la persistencia de señales que evidencian cambios relevantes en su actividad interna.
Según el más reciente boletín técnico, se mantiene el registro de sismicidad asociada al movimiento de fluidos dentro del edificio volcánico, con eventos tipo largo periodo (LP), pulsos de tremor (TR) y tremor continuo. Esta actividad se ha concentrado principalmente bajo el cráter y está relacionada con la dinámica interna de los gases y su ascenso hacia la atmósfera.
El SGC también reportó sismos de baja magnitud asociados al fracturamiento de roca, localizados en un radio de 1,5 kilómetros desde el cráter y a profundidades inferiores a 3 kilómetros. Varias de estas señales estuvieron acompañadas de emisiones de ceniza que se dispersaron hacia el noroccidente, alcanzando columnas de hasta 700 metros. En total, se registraron siete episodios de emisión de ceniza, para los cuales se emitieron alertas dirigidas a la Aeronáutica Civil.
Adicionalmente, Jaime Raigosa, coordinador del Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Popayán, confirmó la detección de nuevos puntos de desgasificación en las zonas norte y noroccidental del volcán. Explicó que estas emisiones están vinculadas con fracturas internas que facilitan el flujo de gases hacia la superficie.
El organismo técnico también reportó la persistencia de concentraciones significativas de dióxido de azufre (SO₂), detectadas mediante sistemas satelitales, con dispersión predominante hacia el nororiente en un radio de hasta 250 kilómetros.
El SGC reiteró que, bajo alerta naranja, pueden presentarse fluctuaciones en los niveles de actividad. Aunque en ciertos momentos se observen disminuciones, estas no deben interpretarse como un retorno a la estabilidad del sistema volcánico.
La entidad recordó a las autoridades y a la ciudadanía la importancia de mantenerse informados a través de los canales oficiales y atender las recomendaciones de gestión del riesgo, dado que el comportamiento del Puracé continúa siendo variable y requiere monitoreo permanente.









