La Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) impuso una sanción de más de $3.000 millones a Movistar por implementar prácticas que impedían ilegalmente a sus usuarios prepago cambiar de operador, violando el derecho a la portabilidad numérica en Colombia.
La investigación reveló que, a través del programa ‘Bono Fidelización Prepago Siempre Conectado’, Movistar generaba deudas ficticias de $1.500 a usuarios que acumulaban recargas mensuales iguales o superiores a $18.000 y $20.000 en paquetes o reactivaciones de servicio, activando automáticamente un bono de minutos y datos.
Aunque el valor del bono era supuestamente “condonado” al finalizar el mes si el usuario permanecía en Movistar, la situación cambiaba cuando el cliente solicitaba portarse a otro operador: la empresa bloqueaba la portabilidad alegando la existencia de la deuda, pese a que muchos usuarios desconocían el origen de la misma.
“El operador creó un hipotético beneficio a los usuarios prepago que era ‘condonado’ al final de mes si el cliente permanecía en el servicio prepago”, indicó la SIC en su pronunciamiento, señalando que la práctica constituía una barrera artificial que restringía la libre elección de los consumidores.
La sanción se fundamentó en que Movistar condicionaba el cambio de operador al pago de una obligación que no correspondía a una contraprestación informada ni aceptada por los usuarios, infringiendo así los derechos de los consumidores en el país.