Por: Yasher Bolívar Pérez
Aunque los Marineros de Seattle cayeron 5-2 frente a los Diamondbacks de Arizona, la noche dejó una noticia que resuena con fuerza en Barranquilla: Dónovan Solano conectó su primer cuadrangular de la temporada 2025. El batazo, sólido y certero, recorrió 381 pies tras un lanzamiento de 90.5 mph del venezolano Eduardo Rodríguez. Fue un jonrón sin corredores en base, pero con peso simbólico: el barranquillero vuelve a sonar con fuerza en la MLB.
Solano, quien ocupó la primera base y fue séptimo en el orden ofensivo, terminó la jornada de 4-2, con una carrera anotada y otra impulsada, elevando su promedio ofensivo a .195. No ha sido un arranque fácil de temporada, pero este vuelacercas —el número 41 de su carrera en Grandes Ligas— marca un punto de inflexión. Un mensaje claro: el “Donnie Barrels” sigue vigente y con hambre de juego.
En medio de una campaña irregular para Seattle, la conexión de Solano ofrece más que una cifra estadística: es un recordatorio del talento y la perseverancia de uno de los pocos colombianos en la élite del béisbol mundial. Aunque el resultado del juego no favoreció a su equipo, el impacto de su swing fue suficiente para encender el orgullo caribe.
