Por: Yasher Bolívar Pérez
Con una actuación estelar de Jalen Williams, que firmó 40 puntos, los Oklahoma City Thunder vencieron 120-109 a los Indiana Pacers en el quinto juego de las Finales de la NBA y quedaron a una victoria del título. La defensa de los locales fue clave para frenar el irregular desempeño de Indiana, afectado por la baja forma de Haliburton, visiblemente tocado físicamente.
El duelo fue una montaña rusa emocional: los Pacers amagaron con una remontada en el último cuarto gracias al impulso de T.J. McConnell, pero no fue suficiente ante el cierre firme del Thunder, que además contó con aportes decisivos de Shai Gilgeous-Alexander y Lu Dort.
Con la serie 3-2, el próximo partido (en Indianápolis) será decisivo para los Pacers, que están obligados a ganar para forzar un séptimo encuentro. Mientras tanto, Oklahoma tiene su primer “match point” para consagrarse campeón de la NBA.