Con el propósito de que los hogares damnificados puedan reparar sus viviendas, afectadas por fuertes vientos y lluvias, la gobernadora del Atlántico, Elsa Noguera, viene entregando elementos de construcción en los diferentes municipios.
De acuerdo con la mandataria departamental, con la entrega de estos materiales «estamos cumpliéndoles a 2.474 familias afectadas por lluvias y vendavales que han dejado casas destechadas y muchas de ellas destrozadas. De tal forma que puedan reconstruir sus viviendas y recuperar la tranquilidad y la esperanza».
La entrega de los materiales de construcción, como láminas de fibrocemento No 4,6 y 8, láminas de zinc, amarras, caballetes, bloques, listones de madera, bultos de cemento, se inició en Manatí y, posteriormente, siguió en los municipios de Santo Tomás, Palmar de Varela, Malambo, Sabanalarga, Candelaria, Baranoa, Ponedera y Juan de Acosta, donde además se entregaron kits de alimentos, cocina, aseo y colchonetas.
Clara Puerto, afectada por un vendaval el pasado 19 de junio en el municipio de Baranoa, fue una de las primeras en recibir ayuda de parte de la Gobernación del Atlántico.
«Estamos muy agradecidos con la gobernadora, Elsa Noguera, y la subsecretaria de Prevención de Desastres, Candelaria Hernández, por preocuparse por nosotros y traernos estas ayudas. Con estos materiales podré arreglar mi casa y vivir en condiciones dignas», expresó Clara Puerto.
Esta mujer residente desde hace 5 años en el barrio Altos de la Sabana, de Baranoa, relató que esa tarde vivieron momentos de angustia. «Cuando empezó el viento estaba con mi hija recién parida y mi niña pequeña. De repente veo que el techo viene para abajo, mi hija gritó y enseguida cogí a las dos niñas, las envolví en una sábana y me las llevé para donde una vecina, pero el viento también le voló parte del techo a la vecina, lo que hice fue clamar a Dios misericordia», dijo Clara al recibir los materiales de construcción a través de la Gobernadora.
Otro de los afectados por el invierno es Parmenidez Díaz Gómez, residente en el barrio 20 de enero de Sabanalarga, quien contó que fue «terrible» lo ocurrido la noche del 26 de mayo.
«El agua del arroyo Oído inundó mi vivienda y las fuertes brisas me volaron las láminas de zinc», dijo este oficial de albañilería al tiempo que expresó su agradecimiento a la gobernadora, Elsa Noguera.
A la fecha, 68 barrios de 9 municipios se han visto afectados por estos fenómenos naturales (18 vendavales y un deslizamiento). En Baranoa 54 familias resultaron afectadas, en Candelaria, 742; en Juan de Acosta, 60; Malambo, 48; Manatí, 1.142; Palmar de Varela, 86; Ponedera, 52; Sabanalarga 56 y 232 en Santo Tomás, para un total de 2.474 familias que ya recibieron las ayudas entregadas por la Gobernación del Atlántico.
La subsecretaria de Prevención y Atención de Desastres del Departamento, Candelaria Hernández, explicó que los beneficiados obedecen al censo realizado de manera coordinada con miembros de la Defensa Civil, quienes visitaron las casas afectadas tomando nota de los daños causados por los vendavales vividos días anteriores en el Departamento, cumpliendo los protocolos de bioseguridad.
La funcionaria destacó que estas ayudas, que contribuyen a solventar la problemática climática que afrontan los atlanticenses, son posibles luego de la ardua gestión que realizó la Gobernación ante la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres.
