En el barrio Nueva Esperanza Etapa III, el silencio de la tarde fue interrumpido por el dolor de una hija que, al buscar a su padre, encontró la tragedia esperándola en casa.
Manuel Clemente Corrales Cantillo, un pescador de 62 años, fue hallado sin vida en el interior de su vivienda, ubicada en la calle 65 con carrera 6. Lo encontró su hija, preocupada porque no sabía nada de él desde el mediodía. Al ingresar, lo vio tendido en el suelo, con evidentes signos de violencia: golpes y moretones marcaban su cuerpo.
Intentó salvarlo. Lo llevó con urgencia al Hospital Juan Domínguez Romero, pero ya era tarde. Manuel llegó sin signos vitales.
La comunidad está consternada. Vecinos lo recuerdan como un hombre trabajador, tranquilo, que vivía del mar y de su esfuerzo diario. Las autoridades, por su parte, iniciaron la investigación para esclarecer las circunstancias de esta muerte que hoy enluta a una familia y deja preguntas flotando en el aire.
Unidades de la Seccional de Investigación Judicial están al frente del caso. La justicia, ahora, deberá hablar por Manuel.
