En medio del aumento de las tensiones con Estados Unidos, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, hizo este miércoles un llamado directo a la unión entre Venezuela y Colombia como garantía para preservar la paz y evitar cualquier intento de vulnerar la soberanía de ambos países.
Durante un discurso transmitido por medios oficiales y reseñado por Telesur, el mandatario denunció lo que calificó como una estrategia histórica de los imperios para dividir a los pueblos de la región.
“Hay una máxima de los imperios durante siglos y es ‘divide y vencerás’. ¿Y cuánto han hecho por dividirnos a Colombia y Venezuela? Todos los días. La mayor garantía que tenemos de paz, estabilidad y respeto en el mundo es la unión”, afirmó.
Maduro recordó que este 18 de diciembre se cumplieron 206 años de la aprobación de la Ley Fundamental de la República de Colombia, que dio origen a la Gran Colombia, hecho que —según dijo— representa un legado de integración y libertad para Suramérica.
En ese contexto, envió un mensaje directo al pueblo colombiano, a sus fuerzas políticas, sociales y militares.
“Le hago mi llamado, ratificado con amor profundo de grancolombiano que me siento, al pueblo de a pie de Colombia, a sus movimientos sociales, a sus fuerzas políticas y a los militares de Colombia, que conozco muy bien. Los llamo a la unión perfecta con Venezuela para que nadie ose tocar la soberanía de nuestros países”, expresó.
Duras críticas a Estados Unidos
En otro tramo de su intervención, el jefe de Estado venezolano acusó a Washington de pretender imponer un “Gobierno títere” en Venezuela, el cual —según ironizó— “no duraría ni 47 horas”.
“Es una pretensión guerrerista y colonialista. Se pretende un cambio de régimen para entregar la Constitución, la soberanía y las riquezas del país. Eso sencillamente no va a pasar”, sostuvo.
Las declaraciones hacen referencia a las recientes medidas anunciadas por el presidente estadounidense Donald Trump, entre ellas el bloqueo a tanqueros sancionados que transporten crudo venezolano, bajo el argumento de presunto “robo” de activos, así como la designación de las altas autoridades venezolanas como organización terrorista extranjera.
Maduro rechazó dichas acciones y aseguró que violan el derecho internacional.
“Jamás Venezuela será colonia de nadie. Es ilegal, de acuerdo con la Carta de Naciones Unidas, impedir el libre comercio naval en los mares y océanos del mundo”, enfatizó.
“No es tiempo de piratería”
El mandatario insistió en que Venezuela continuará comerciando su petróleo y demás recursos naturales, los cuales —según recordó— pertenecen por mandato constitucional al pueblo venezolano.
“No es tiempo de corsarios ni de piratería. Venezuela seguirá comerciando todos sus productos y defendiendo sus riquezas, que pertenecen a su único dueño legítimo: el soberano pueblo de Venezuela”, afirmó.
Asimismo, aseguró que el país cuenta no solo con “la razón”, sino también con “la fuerza política, espiritual y el apoyo de los pueblos del mundo” frente a lo que calificó como una “escalada guerrerista, ilegal y desproporcionada”.
Maduro reiteró que la Constitución venezolana establece como derechos irrenunciables la independencia, la soberanía, la integridad territorial y la autodeterminación, y recordó que el territorio nacional no puede ser cedido ni ocupado por fuerzas extranjeras.
“El espacio geográfico venezolano es un espacio de paz y no se podrán establecer bases militares extranjeras. Defenderemos esta Constitución y a nuestro pueblo por todas las vías que sea necesario”, concluyó.








