El Ministerio de Sanidad de la Franja de Gaza informó que nueve habitantes del enclave fallecieron el domingo 30 de noviembre como consecuencia de acciones militares israelíes, a pesar de la vigencia del alto el fuego declarado el pasado 10 de octubre.
Con estas nuevas víctimas, la cifra total de personas muertas desde el inicio de la tregua asciende a 356, mientras que 909 han resultado heridas en el mismo periodo, según el reporte oficial.
Las autoridades gazatíes indicaron que Israel mantiene el control del 54 % del territorio, luego del repliegue de sus tropas hacia la denominada “línea amarilla”. En ese perímetro, aseguran, se registran disparos casi diarios contra civiles que, de acuerdo con el Ejército israelí, se aproximan a zonas restringidas.
Diversos habitantes intentan regresar a sus viviendas o buscan alimentos, sin conocer con precisión los límites establecidos tras las operaciones militares.
Las labores de rescate continúan siendo limitadas. La Defensa Civil ha recuperado más de 600 cuerpos entre los escombros, en un contexto donde —según datos locales— más del 80 % de las edificaciones han sido destruidas o presentan daños severos. Las autoridades insisten en que miles de víctimas podrían permanecer bajo las ruinas, pero el trabajo se ve obstaculizado por la escasez de maquinaria pesada y combustibles.
Desde el inicio de la ofensiva israelí tras los ataques de Hamás en octubre de 2023, se han registrado 70.112 personas fallecidas y 170.986 heridas en la Franja de Gaza, muchas con lesiones permanentes y amputaciones, de acuerdo con los informes médicos del enclave.









