La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, criticó este viernes el plan fiscal aprobado por el Congreso de Estados Unidos, que contempla un presupuesto de 170.000 millones de dólares para reforzar la seguridad fronteriza, deportaciones y construcción de centros de detención de migrantes.
“No estamos de acuerdo. La migración debe atenderse con cooperación para el desarrollo”, afirmó la mandataria en su conferencia de prensa, señalando que criminalizar a los migrantes “no es bueno ni desde el punto de vista humanista ni económico”.
Sheinbaum resaltó que miles de mexicanos y latinoamericanos han trabajado durante años en sectores esenciales de la economía de EE. UU., como la agricultura, aportando tanto a la economía estadounidense como a la de sus países mediante las remesas.
Recordó además que el presidente Donald Trump detuvo redadas recientes por presión de empresarios estadounidenses que reportaron afectaciones en sus actividades por la falta de trabajadores migrantes.