El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha ordenado cancelar de inmediato todos los esfuerzos diplomáticos para negociar con Venezuela. Así lo informó este lunes The New York Times, citando fuentes cercanas a la decisión.
La orden fue comunicada directamente por Trump a su enviado especial, Richard Grenell, instruyéndole a detener todo acercamiento y poniendo fin a las gestiones que Grenell había encabezado para explorar posibles negociaciones con el gobierno venezolano.
Esta decisión marca un cambio significativo en la política de Washington hacia el país suramericano. La medida se produce en un contexto de alta tensión militar y retórica confrontacional:
- Presencia Militar: Estados Unidos mantiene desplegados en el Caribe al menos ocho buques de guerra y un submarino de ataque rápido de propulsión nuclear, junto con más de 4.500 soldados.
- Argumento de Combate al Narcotráfico: Washington justifica esta presencia y las recientes acciones militares—que incluyen la destrucción de al menos cinco embarcaciones y la muerte de más de 20 personas—bajo el argumento de combatir el narcotráfico.
- Acusación de Venezuela: El gobierno de Nicolás Maduro sostiene que el despliegue es un intento de propiciar un “cambio de régimen” e imponer “Gobiernos títeres” en Venezuela.
- Conflicto Armado: Trump ha declarado que el país se encuentra en un “conflicto armado no internacional” con los carteles, utilizando esta justificación para los ataques.
La cancelación de la vía diplomática intensifica la estrategia de presión de la Casa Blanca contra el gobierno de Maduro.