El Comité de Asignaciones de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, por medio de un informe liderado por el congresista republicano Mario Díaz-Balart, advirtió que la asistencia no militar para Colombia se reducirá a la mitad respecto al nivel aprobado en el año fiscal 2025. El legislador señaló que esta drástica decisión responde a “las políticas perjudiciales, el comportamiento errático y las relaciones maliciosas de la Administración Petro”, que —según el documento— contradicen los intereses estratégicos y de seguridad de Estados Unidos.
El informe también menciona, con especial preocupación, los señalamientos de consumo de drogas en las “más altas esferas del gobierno colombiano”, en clara alusión a las acusaciones que pesan sobre el presidente Gustavo Petro. El congresista recoge además las solicitudes hechas por parlamentarios colombianos para realizar exámenes toxicológicos al jefe de Estado, peticiones que han tensado aún más las relaciones diplomáticas entre ambos países.
Díaz-Balart alerta sobre el creciente deterioro de la seguridad interna y la inestabilidad política en Colombia, haciendo referencia directa al atentado que sufrió el senador Miguel Uribe, del Centro Democrático, el pasado 7 de junio, y que fue interpretado como un hecho que trasciende la coyuntura electoral y compromete la integridad del sistema democrático.
En el informe se dedica un apartado a expresar inquietudes sobre la situación jurídica del expresidente Álvaro Uribe Vélez. Según el congresista, existen reportes alarmantes de presuntas violaciones al debido proceso, vigilancia ilegal, obstáculos para la defensa y posibles conflictos de interés en los procedimientos judiciales que se adelantan contra el exmandatario.
La reducción presupuestal propuesta marca un giro severo en la tradicional cooperación bilateral entre Washington y Bogotá, y anticipa un periodo de mayor escrutinio a la gestión de Petro desde el Capitolio.