El recién posesionado ministro de la Igualdad, Juan Carlos Florián, sorprendió con una petición poco habitual: quiere que lo llamen “ministra”. En una entrevista en el pódcast A Pelo, explicó que se nombra en femenino porque se considera “una persona y una marica”, aclarando que no se identifica como gay.
Florián habló abiertamente de su trayectoria, marcada por periodos de discriminación, su diagnóstico de VIH desde hace 20 años y su pasado en la industria del cine para adultos. Rechazó que su condición de salud sea utilizada para cuestionar su capacidad como funcionario: “No somos ni menos aptas ni menos capaces para poder asumir un cargo”.
El ministro también relató su experiencia con el consumo de drogas inyectables, iniciado a los 38 años, y su proceso de desintoxicación, del que lleva año y medio. “Estuve en situaciones muy complicadas donde puse en riesgo mi economía, mi seguridad, mi vida, mi salud por el consumo”, señaló, asegurando que estas vivencias le dan legitimidad para hablar sobre el uso de sustancias psicoactivas.
Respecto a su rol en el Ministerio de Igualdad, afirmó que asume el cargo como una gran responsabilidad y que no busca “LGBTizar” la entidad, sino trabajar por diversos sectores sociales. Florián aseguró sentirse “salvada” por la oportunidad que le dio el presidente y se definió como una sobreviviente que intenta transformar sus experiencias en acciones positivas.