Completamente destruida quedó la vivienda de la mujer que en días pasados habría asesinado a Kelly Castillo, en medio de una riña a cuchillo en el barrio Carrizal, suroccidente de Barranquilla.
El ataque se registró en la madrugada de este jueves, cuando un grupo de personas llegó hasta el lugar y comenzó a saquearla y a lanzarle piedras.
La vivienda quedó completamente destruida: sin puertas, sin ventanas vidrios rotos y destechada.