Gilberto de Jesús Alzate García, de 50 años, fue asesinado tras pedir a sus vecinos que bajaran el volumen de la música en vísperas del Día de la Madre.
El hombre, víctima de una riña, sufrió lesiones con arma cortopunzante, mientras que su hijo resultó herido. Tres personas fueron capturadas por estos hechos en la ciudad.
La intolerancia cobra una vida más en medio de una celebración familiar.