El anuncio lo hizo el Director General de la Policía Nacional, Jorge Luis Vargas Valencia, quien mediante un video informó acerca del relevo inmediato del comandante de Policía Sucre, coronel Carlos Andrés Correa Rodríguez por el escandaloso caso de los jóvenes asesinados en el Chochó.
Tras el operativo de la Policía Nacional contra tres supuestos integrantes del Clan del Golfo, en Sucre, fue relevado de su cargo el comandante de ese departamento, el coronel Carlos Andrés Correa Rodríguez, por los supuestos tres falsos positivos
Las víctimas son Jesús David Díaz de 18 años, José Carlos Arévalo de 20 años y Carlos Alberto Ibáñez de 26 años. Los tres jóvenes fallecieron en una clínica de Sincelejo donde fueron remitidos por los mismos oficiales.
De hecho, una de las madres de los jóvenes fallecidos en entrevista con Noticias Caracol sostuvo que su hijo era inocente y le pidió a la Policía aclarar estos hechos. “Le pido a la Policía que esclarezca estos hechos, porque así como nosotros estamos sufriendo, hay dos familias más… Ay Dios mio, ellos no eran del Clan del Golfo como lo dijo ese coronel”.
Según el comunicado de la institución, miembros de la Policía se encontraban adelantando actividades de control en una panadería cuando fueron abordados por sujetos que se movilizaban en motocicleta.
De igual manera, el inspector general de la Policía Nacional viajó hasta Sincelejo y suspendió a ocho policías de sus cargos “mientras se adelantan las respectivas investigaciones”, dijo el general Ramiro Castrillón Lara.
Asimismo, por medio de un comunicado de prensa, el comando de la Policía en Sucre dio a conocer que no seguirá en su cargo como comandante de la Policía, el coronel Carlos Andrés Correa por el caso de los jóvenes asesinados en Chochó.
El comunicado dice lo siguiente:
En atención a los hechos ocurridos el 25 de julio en el departamento de Sucre, y luego de que la Inspección General de la Policía Nacional suspendiera a 8 miembros de la Institución por su presunta responsabilidad en los hechos que ocurrieron con posterioridad al asesinato del patrullero Diego Felipe Ruiz Rincón en el municipio de Sampués, el Director General de la Policía Nacional expresa su compromiso con las familias de los tres jóvenes fallecidos para que a través de las instancias correspondientes y en el marco del debido proceso se esclarezca lo ocurrido.
En ese sentido, el general Jorge Luis Vargas Valencia hace varias precisiones:
- La colaboración fluida para que en el menor tiempo posible se depuren responsabilidades y se lleve a cabo la captura de quienes corresponda. En caso de comprobarse la actuación irregular de algún integrante de la Policía Nacional, debe aplicarse todo el peso de la ley.
- Mientras la investigación penal está en manos de la Fiscalía General de la Nación, la investigación disciplinaria la tiene la Inspección General de la Policía Nacional, que de la manera más ágil y en el marco del nuevo estatuto disciplinario expedido al amparo del proceso de Transformación Institucional, suspendió a 8 uniformados, incluido un teniente coronel, siendo la primera autoridad en tomar medidas y actuar frente a este caso. A propósito, la Inspección General han recepcionado 42 pruebas (25 testimoniales y 17documentales), que están siendo compartidas con las otras instituciones.
- Se ordena el relevo inmediato del Comandante del Departamento de Policía Sucre, responsable de la unidad en cuya jurisdicción sucedieron los hechos.
- En tanto continúa el proceso disciplinario, se espera que las actuaciones penales conduzcan a la pronta judicialización de quienes, con evidencia física y material probatorio que así lo demuestre, deban responder ante jueces de la república.
Cabe destacar que el día martes se conoció la notacia que el comandante operativo de Sucre (J3) teniente coronel Benjamín Núñez, oficial que fue separado de su cargo mientras se adelantan las investigaciones por la muerte de Carlos Ibáñez, Jesús David Díaz y José Carlos Arévalo, los 3 jóvenes asesinados en extrañas ciscustancias en manos de la Policía Nacional luego de ser capturados y acusados de un crimen que al parecer no cometieron.