Magistrados resaltan falta de resolución de recurso previo y competencia de la autoridad de salud.
La EPS Sanitas sufrió un revés legal en su intento por impugnar la intervención de la Superintendencia Nacional de Salud, luego de que el Tribunal Superior de Bogotá declarara improcedente un recurso de tutela presentado por la empresa.
El Tribunal, al evaluar la acción, consideró que Sanitas aún tiene un recurso de reposición pendiente de resolver, lo que impide emitir un fallo sobre la tutela, ya que el caso está siendo tratado por el juez natural.
En palabras del documento judicial, «mientras la réplica esté en curso no se puede invadir la órbita del juez natural», lo que indica que existen procesos legales previos que deben ser agotados antes de recurrir a la tutela.
Los magistrados destacaron que los accionistas de Sanitas tuvieron la oportunidad de presentar recursos para impugnar la actuación de la SuperSalud, pero subrayaron que la intervención a la EPS está respaldada por la autoridad competente.
En este sentido, señalaron que las acciones de la Superintendencia gozan de presunción de legalidad y deben ser refutadas ante el juez competente, lo que indica la legitimidad de la intervención en Sanitas.
Además, resaltaron que Juan Pablo Rueda, quien era el representante legal de Sanitas, ya no ostenta dicho cargo, lo que le impide presentar solicitudes de amparo a los derechos de la empresa afectada por la resolución.
Aunque la decisión del Tribunal representa un golpe para Sanitas, aún queda un recurso pendiente en el Consejo de Estado, que podría ser la última oportunidad para revertir la intervención del Gobierno en la EPS.