La empleada grabó con su celular el momento en que conoció al astro argentino y terminó sin trabajo, aunque asegura que “vendrán cosas mejores”.
Para muchas personas, encontrarse con un famoso o una figura pública puede ser un momento emocionante, incluso una fantasía cumplida. Sin embargo, en algunos casos este tipo de encuentros puede traer consecuencias inesperadas, e incluso costar el trabajo.
Eso fue lo que le ocurrió a Yumara Salinas, una trabajadora venezolana radicada en Miami, quien jamás imaginó que un breve encuentro con Lionel Messi terminaría afectando su vida laboral. Para ella, todo parecía un gesto inofensivo.
Un video de 11 segundos, que consideró un regalo para su pareja, terminó convirtiéndose en la causa de su despido. Lo que empezó como una sorpresa terminó dejándola entre lágrimas e incertidumbre, en medio de la viralidad y las políticas de los recintos deportivos.
¿Despidieron a una mujer por culpa de Messi? Esto ocurrió
Yumara trabajaba en el estadio del Inter Miami y realizaba funciones que no han sido especificadas oficialmente. Durante una de sus jornadas laborales, se le presentó la oportunidad de acercarse al astro argentino y pedirle un saludo para su pareja.
En el video se observa cómo ella le explica a Lionel Messi: “Gredito Colón… mi pareja”. El jugador, entre risas, responde: “¡Ah!, pensé que era para tu hijo… Gredito Colón, saludos”.
El momento se volvió viral cuando Yumara lo publicó en Instagram con un mensaje que mezclaba orgullo y tristeza: “Y fue así como le hice realidad el sueño a mi pareja… que el mejor jugador del mundo le enviara un saludo. Lastimosamente, esto me costó mi empleo. El tiempo de Dios es perfecto y algo mejor vendrá para mí”.
A partir de ese instante empezaron las consecuencias. Según medios internacionales, la empresa para la que trabajaba le envió una notificación en la que le prohibía continuar con sus funciones en el estadio. No se ha revelado el nombre de la compañía ni los detalles precisos del despido
Medios como LatinUS señalaron que el video habría sido considerado un acto “inapropiado” durante el horario laboral, especialmente en un entorno con protocolos estrictos para interactuar con deportistas de élite.
¿La decisión fue desproporcionada? Esto dicen las redes sociales
La viralización del video abrió un debate público. Miles de usuarios expresaron solidaridad con Yumara y aseguraron que la sanción fue desproporcionada para un gesto afectuoso. Otros, en cambio, señalaron que en escenarios deportivos las reglas suelen ser claras: no grabar, no acercarse sin autorización y no publicar contenido desde zonas internas.
Por ahora, ni Lionel Messi ni el Inter Miami han emitido comentarios sobre el caso. Tampoco la empresa empleadora ha entregado una postura oficial.
Mientras tanto, Yumara intenta mantener la esperanza. Aunque enfrenta el impacto de haber perdido su trabajo, repite una frase que la acompaña desde el inicio de esta historia: “El tiempo de Dios es perfecto”.









