Graves denuncias sobre la investigación que se adelanta por el grave caso de agresión sucedido en el edificio La Ría al norte de Barranquilla, denunció el abogado Alfonso Camerano Fuentes.
Él justicia, quien representa a la pediatra Dalila Peñaranda Fairuth y Carmen Pérez Monterrosa, en el proceso que sigue la Fiscalía Seccional de Barranquilla en contra de Jalim Rebaje y Assad Baraque, por los delitos de lesiones personales con perturbación funcional y sicológica, señaló en un comunicado dirigido a la opinión pública, que la Fiscal Seccional dividió la investigación en dos partes, una por el delito contra servidor público, proceso del que afirma fue enviado a la Fiscalía 17 de la Unidad de Delitos contra la Administración Pública, y el otro por los delitos ya señalados, el cual fue asignado a la Fiscalía 30 Local.
Camerano Fuentes aseguró en el documento escrito, que la investigación en el caso de sus clientes “continúa desarrollando el programa metodológico, tendiente a obtener los elementos materiales probatorios y la incapacidad consolidada a cada una de las víctimas, doctora Dalila Peñaranda Fairuth, médica pediatra, y de la señora Carmen Pérez Monterrosa, ordenada al Instituto Nacional de Medicina Legal, que debe dictaminar la prolongación de la misma y las consecuencias, con fundamento en el diagnóstico que deba ser emitido”.
En lo atinente al proceso de violencia contra servidor público, en el cual se registra como víctima un patrullero de la Policía adscrito a la Policía Metropolitana de Barranquilla, quien terminó agredido en medio de su infructuoso intento por evitar la golpiza a las mujeres, señala Camerano, que el fiscal del caso solicitó la práctica de la audiencia, la cual fue realizada ante un juez de control de garantías el pasado 21 de septiembre “sin citar a las víctimas, Dalila Peñaranda Fairuth y Carmen Pérez Monterrosa, ni a sus apoderados, vinculando exclusivamente al imputado, señor Assad Baraque, prescindiendo del resto de agresores, señores Jalim Rebaje, Martín Caro Parra, Fanny Franco Pérez, Herbert Blanco Bendeck y otros”.
En su grave denuncia Alfonso Camerano Fuentes agrega que, “Considerando también de manera exclusiva como víctima al agente de la Policía nacional, Alexander Acosta, cuando la conducta punible plasmada en el ejercicio de la fuerza irracional de los indiciados y del imputado fue sustituir con el ejercicio de la violencia la presencia del Estado que protegía a las mujeres, resultando artificiosa la escisión de la acción penal, para favorecer al agraciado imputado Assad Baraque, aplicando medidas laxas frente a la salvaje golpiza, y quien goza de una libertad que se convierte en una burla contra las víctimas (…) degradando a la justicia de Colombia.
El abogado Alfonso Camerano señala que ha solicitado a la Procuraduría Delegada en asuntos penales, una vigilancia especial para ambas actuaciones, ya que afirma que sobre sus representadas judiciales se ha “cernido toda una serie de maniobras procesales que ha confundido a su acomodo la máxima que a las mujeres no se les toca ni con el pétalo de una rosa”.