Tal es la presión y amenaza a los sectores de Barranquilla y municipios del área metropolitana con la situación se presenta en algunos sectores que consideran un riesgo de avisar a la Policía, por lo cual prefieren pagar las extorsiones antes que llamarlos, por temor a represalias.
Este es el caso en particular de un empresario que tiene una red de distribución de productos de la canasta familiar para los diferentes tenderos de Barranquilla y su área metropolitana, donde varios quienes denunciaron este jueves que vienen siendo víctimas de extorsiones por parte de delincuentes que les cobran dinero para por dejarlos trabajar.
“Es una situación que ya se ha vuelto insostenible tanto para las empresas de consumo masivo, grandes o pequeñas, como para las empresas del sector logístico de transporte; cada vez el tema es más complejo, hasta el punto de que toca pagar lo que estos delincuentes llaman ‘primas’, que consisten en permisos para poder laborar en ciertos períodos de tiempo adicional. Cada vez que entrada un vehículo a distribuir los productos de la canasta familiar en las diferentes tiendas de los barrios debe pagar la cuota”, narró un empresario que no fue identificado a Emisora Atlántico de Barranquilla.
Agregó que “ya secuestran a los conductores, a los vehículos, se roban la mercancía, te quitan el dinero, atemorizan al personal. Esto definitivamente es algo que dificulta la actividad a todos los empresarios, diría yo.”.
Sostuvo que, así como la Policía se reunió con algunos comerciantes de la ciudad y el área metropolitana para contrarrestar la extorsión, también se debe hacer con los empresarios que se dedican a la distribución de los alimentos. “Creo que esto amerita que esta mesa de trabajo que realizan con Undeco, con la Policía y los comerciantes y participe con la Cámara de Comercio, a través de los clústeres de logística, incluso, la Alcaldía, que se trabaje en todos los sectores”.
Indicó que las dificultades para trabajar se presentan principalmente en municipios como Malambo. “Eso es algo insostenible. Aquí en Barranquilla está La Cangrejera, Don Bosco, Rebolo, El Ferry, entre otros”.
“De la base de datos que tenemos nosotros, que son unas 8.500 tiendas, el 60 por ciento de nuestro mapa de colores, están catalogados en zona de riesgo y de costo logístico de seguridad, vacunas y demás”, apuntó.
Sobre la manera cómo operan los delincuentes sostuvo que “ellos dejan ingresar a los vehículos, cuando ya están en zona simplemente se acercan unos hombres armados, los atemorizan, le quitan el vehículo, lo llevan a una zona no poblada o algún lugar donde puedan evacuar toda la mercancía, quintan las cajas fuertes, los amarran. A veces piden el pago por liberarlos”.
“Sobre esto hemos colocado múltiples denuncias, pero no avanzan nunca las investigaciones, realmente la única opción que nos queda es: o salirnos de la zona o seguir pagando las extorsiones para poder trabajar. Esa es la realidad. Todas las compañías tienen que dar (pagar) si no, no pueden comercializar sus productos. Esa es la realidad”, afirmó.
Insistió en que los distribuidores de productos de la canasta familiar se ven abocados a pagar extorsiones. “Cualquier tipo de producto, incluso, compañías de paqueteo, de última milla, entrega de muebles, de enseres, todos tienen que pagar, de lo contrario le roban la mercancía, atemorizan a la gente, los retinen, los secuestran...”.
“En el caso nuestro, tenemos registrado que hemos pagado en lo que va del año, 45 millones de pesos. A nosotros se nos presentan entre uno y dos atracos mensuales, uno cada 15 días y en cuanto a los montos, para el pago de extorsión, eso varía de acuerdo a la zona. Pero oscilan entre 30.000, 40.000, 50.000 y hasta 90.000 pesos, por cada vehículo”, manifestó.
Indicó que “en algunas zonas se paga para que circules por un periodo de un mes, seis meses, un año, y en otros hay que pagar diario, de acuerdo a lo que se esté distribuyendo. Por ejemplo, si son los vehículos de bebidas azucaradas, los montos son mayores, si es pequeño es menor; puede ser desde 20.000 hasta 80.000 por cada carro que ingrese”.
Dijo que eventualmente se pide el acompañamiento a la Policía, “pero, incluso, para la fuerza pública el tema es muy complejo. Porque hay un sin número de vehículos en ciertas zonas y es imposible que ellos acompañen a todos. La Policía te puede acompañar una o dos veces, pero la vez que entres solo al sector ya te están esperando y te dicen: ‘pediste el apoyo de la Policía, ahora te atraco’. Eso también suele suceder”.
Insistió en que el que pide apoyo de la Policía queda sentenciado para la próxima que ingrese solo al sector. “Y ese es un riesgo que no puede corre nuestra gente”.
Terminó diciendo que esto hace que el negocio sea inviable. “Finalmente se termina transmitiendo ese sobrecosto a la gente del común, al tendero y el tendero a su vez al consumidor final. Afectando el tema inflacionario, el tema económico, familiar, entre otros”.
El comandante operativo de la Policía Metropolitana, John Sepúlveda, comandante Operativo, manifestó que “no se debe estigmatizar a los barrios, ni a la comunidad, son los reductos los que están afectando. No solo afectan a los comerciantes si no a la misma comunidad, que también los han denunciado. ¿Por qué? Las personas que vienen en estos barrios quedan afectadas porque no les llega el suministro alimenticio. Por eso estaremos haciendo las caravanas para que los comerciantes ingresen a los barrios y la comunidad pueda estar tranquila”.
El oficial aclaró que la Policía no está perdiendo la batalla contra los delincuentes. “Estamos presentes en los barrios que han denunciado, les hemos dado duro y así lo dicen los resultados que hemos presentado en los últimos días. Les hemos impactado duro a esta delincuencia, en los barrios Santa María, San Fernando, Villa Selene, La Central en Soledad, aquí mismo en Barranquillita. Lo que estamos diciendo es que la gente no pague, que denuncie, que eso nos da la base a nosotros para poder intervenir. Sabemos que muchos no lo hacen por temor, pero tenemos muchos canales y queremos decirles que los comerciantes no están solos”.
EU