Las inundaciones en el sur de Brasil han dejado terribles secuelas, en especial, en el estadio de Rio Grande do Sul y en la ciudad de Porto Alegre.
Según el reporte de las autoridades de ese país en la tarde del miércoles, 100 personas murieron, otras 374 resultados heridas y hay 130 desaparecidas.
Casi 200.000 personas han tenido que ser evacuadas de sus casas.
En medio de esta tragedia que vive Brasil, una de sus máximas figuras deportivas, el futbolista Neymar, hoy jugador del Al-Hilal, ha mostrado una enorme solidaridad con las víctimas de las inundaciones.
Además, este miércoles, un helicóptero de propiedad de Neymar se desplazó a Porto Alegre a llevar agua y comida, y ayudar a las personas damnificadas.