“Es preocupante“, pero no se debe entrar en “pánico” dijo este lunes a los estadounidenses el presidente Joe Biden, al anunciar los pasos tomados por su Administración para controlar la expansión de la variante ómicron en Estados Unidos.
Así lo indicó Biden en una intervención desde la Casa Blanca acompañado del epidemiólogo jefe del Gobierno estadounidense, Antony Fauci.
El mandatario remarcó que el país se encuentra en “mejor situación” que las Navidades del pasado año, y urgió a los ciudadanos a buscar la dosis de refuerzo de las vacunas disponibles en EE.UU.
La nueva variante, identificada por primera vez en Sudáfrica, “es motivo de preocupación, pero no de pánico“, afirmó Biden, al reconocer que es “casi inevitable” que “en algún momento” la nueva variante llegue al país.
A partir de este lunes, EEUU ha impuesto restricciones a los viajeros procedentes de Sudáfrica y otros siete países del sur del continente africano.
“No creemos aún que serán necesarias medidas adicionales”, agregó, y defendió estas limitaciones para poder “ganar tiempo” y aumentar la vacunación en el país.
“Si la gente se vacuna y lleva máscara -agregó- no hay necesidad de confinamientos“.
Estados Unidos, el país más golpeado por la pandemia con más de 775.000 fallecidos, cuenta con casi el 60% de su población vacunada con la pauta completa, y cerca del 20% ha recibido además ya la dosis de refuerzo.